El reporte de la encuesta de Percepción Ciudadana sobre Gobernabilidad, Democracia y Confianza en las Instituciones aplicada por el Instituto Nacional de Estadística e Informática, INEI, confirma una preocupante desafección de los ciudadanos con la democracia, insatisfacción con la gestión de gobernantes y congresistas y una generalizada desconfianza en las instituciones. Más del 78 % declara que no confía en la prensa escrita, la radio y la televisión.

La encuesta del INEI aplicada a una muestra nacional del censo nacional de hogares confirma lo que es evidente: hay un malestar de los ciudadanos con la democracia y con las instituciones y en muchos casos ese malestar se incrementó en un año. Los resultados corresponden al semestre enero junio de 2022 que se comparan con los del periodo enero junio de 2021. Uno de los datos más significativos es el del desconocimiento del concepto de democracia y lo que implica.

En promedio, el 54,8 por ciento de los encuestados dijo saber qué es democracia y el 45,2 % dijo que no lo sabía. En el desglose por ámbito urbano y rural el dato es impresionante: el 71,8 % de los encuestados en el sector rural manifestó que no sabía qué era la democracia. Otro dato revelador es que solo el 16% de los encuestados con educación primaria sabe qué es la democracia y solo el 50,4 de los que tienen educación secundaria dicen saber qué es la democracia.

Y en el punto de cuál es la característica más importante de la democracia también hay hechos significativos. En el total nacional solo el 18,5% considera que es necesario que haya elecciones limpias y transparentes, el 34,5% por ciento cree que es poder expresar libremente las ideas y el 32 % que es el respeto de los derechos de todas las personas. Sobre la utilidad de la democracia, este último punto, el del respeto de los derechos de todos, resulta ser el más significativo porque el 62 por ciento de los encuestados, 2 por ciento más que en 2021, considera que esa es la utilidad fundamental de la democracia. Los departamentos en donde esa postura es arrolladoramente mayoritaria, por encima del promedio nacional, son Ancash, Huánuco, Loreto, Arequipa, San Martín, Tacna, Amazonas y Puno.

El 64 por ciento de los encuestados respondieron que la democracia funciona mal o muy mal, 3 por ciento más que en 2021 y la opinión de una aplastante mayoría, casi 87 por ciento, es que es culpa de los políticos.


El 73,6 por ciento considera que un gobierno democrático es el sistema preferible, 3 puntos porcentuales menos que en 2021. Subió un punto, de 8,4% a 9,4% la opinión de que en algunas circunstancias es preferible un gobierno autoritario que uno democrático, y subió 2 puntos, de 10 a 12%,  la opinión de que les da lo mismo si el gobierno es democrático o autoritario.

La confianza en los partidos políticos y el congreso es prácticamente inexistente: solo el 3,1 por ciento confía en los políticos, 0,8% menos que en 2021, y el 5,4 % confía en el Congreso, 0,9% menos que en el 2021.

En la lista de instituciones que generan índices más altos de desconfianza siguen los gobiernos regionales y las municipalidades distritales. Los medios de comunicación están en un nivel de altísima desconfianza: el 82,6 por ciento de los encuestados no confía en la prensa escrita y el 78,6 % no confía en la radio y la televisión.

No se trata solo de datos fríos. Lo que demuestra la encuesta es un bajo nivel de conexión ciudadana con la gobernabilidad y las instituciones que deberían garantizarla.

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