Niños, mochasueldos y chapafirmas hacen de las suyas impunemente. ¿Y qué hacen los padres y madres de la patria para evitarlo? Wilson Soto de Acción Popular ha presentado un proyecto para restablecer la inmunidad parlamentaria, o sea, para que sea aún más difícil sancionar a los congresistas que cometen delitos, en este caso, ajenos a sus funciones.

La comisión de Ética se ha convertido en una lavandería que termina limpiando de polvo y paja a tirios y troyanos. Y el antejuicio se ha vuelto una barrera para que chapafirmas, mochasueldos y niños sean puestos a disposición de la justicia.

¿Qué reformas debemos impulsar para evitar que el congreso siga siendo el reino de la impunidad?

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